El Telón
A ocho años de haberse estrenado, Mujeres de arena, con sus momentos de profundo drama, sátira, poesía y denuncia explícita hacia las instituciones, cimbró corazones en su participación en la Muestra Estatal de Teatro
MUJERES DE ARENA
TEATRO ALARIFE MARTÍN CASILLAS.
Autor: Humberto Robles. Director: Moisés Orozco.
Grupo: Naui Ejekatl (Cuatro vientos)
Por Flor Batista
Los ojos se acostumbraron a la media luz que sirvió de iluminación durante todo el montaje de corte documental. Cuando el desenlace llegó y las luces se encendieron, varios tuvieron que esconder las lágrimas por pudor, otros mostraban un rostro profundamente conmovido; había quien se removía en su asiento, otros se miraban con enojo y frustración. Pero no hubo un solo espectador –de los pocos que asistieron al llamado– que no sufriera un cambio en su estado de ánimo. Los que entraron a la sala y los que salieron no fueron los mismos.
Los comentarios no fueron pocos, Mujeres de arena con su calidad argumentativa y actoral, con su escenografía sencilla, con su realismo en pleno hervor, y con su momento de sátira hacia el inoperante actuar de las instituciones gubernamentales; con su nada sutil forma de mostrar los hechos a través de estadísticas y datos más que contundentes –¿sabía usted en el código de Chihuahua, la condena por violación es de tres a nueve años de prisión; por robo de ganado de seis a 40 años de cárcel?–, y la música en vivo (piano de Arturo Martínez Arvizú, Manuel Gallardo en las percusiones) le sumaban más drama a una historia que nació para ser contada. Así, el teatro quedó como testimonio de los huesos en el desierto que nunca encontraron culpables.
Mujeres de arena se sumó a la oferta de teatro de 22 puestas en escena de la Muestra Estatal de Teatro 2010. Con la recopilación de textos de Denise Dresser, un poema de Antonio Cerezo, preso en un penal de alta seguridad; una carta de una madre, una hermana de una de las más de 600 desaparecidas, la impactante oración de María Hope dedicada a todas esas mujeres y niñas, datos recopilados por Maricela Ortiz, fundadora de Nuestras Hijas de Regreso a Casa, el diario de una de ellas; todo este concierto unido por el dramaturgo Humberto Robles y llevado por el elenco: Lucía Cortés, Luis Carlos Wong, Judith Hernández, Gaby Domsal, Flor Valencia Berenice Herrera y Rigo Veloz.
Al final, a pesar de que el teatro no se llenó, los pocos espectadores salieron de la sala con una nueva visión de hechos que parecen tan distantes, pero finalmente Juárez no está tan lejos; esa era la sensación general. El clima lluvioso los recibió al salir de la sala, era momento de continuar un sábado lúdico.
